Pocos lugares en las Américas están tan conmocionados por una nueva presidencia de Trump como México, la nación de casi 130 millones de habitantes que el presidente electo convirtió en blanco de numerosas amenazas durante su campaña.
Ahora, mientras Donald Trump se prepara para regresar a la Casa Blanca, México se encuentra nuevamente en el centro de sus posturas agresivas sobre el comercio, la inmigración y el narcotráfico.
A pesar de una fuerte disminución en los cruces fronterizos este año después de que México emergió como un ejecutor de las restricciones migratorias de la administración Biden, las promesas de campaña de Trump sugieren un camino complejo y polémico por delante.