Un tribunal federal en Austin bloqueó el jueves la implementación de una ley de Texas que permitiría a los agentes de policía estatales y locales arrestar a migrantes que cruzan desde México sin autorización, poniéndose del lado del gobierno federal en un enfrentamiento legal sobre la aplicación de la ley de inmigración.
El fallo, del juez David A. Ezra del Distrito Oeste de Texas, fue una victoria para la administración Biden, que había argumentado que la nueva ley estatal violaba los estatutos federales y la Constitución de Estados Unidos.
La ley de Texas debía entrar en vigor el 5 de marzo, pero ahora quedará en suspenso a medida que avance el caso. Al otorgar una orden judicial preliminar, el juez Ezra, designado para el cargo por el presidente Ronald Reagan, señaló que era probable que el gobierno federal eventualmente ganara por los méritos.
Es probable que el gobernador Greg Abbott, que ha actuado agresivamente durante los últimos tres años para crear un sistema estatal de vigilancia fronteriza, apele la decisión.
Texas ha estado peleando con la administración Biden en varios frentes legales, incluida la colocación el año pasado de una barrera de boyas de mil pies en medio del Río Grande y, por separado, la instalación de millas de alambre de púas a lo largo de las orillas del río.