Exalcalde de Acapulco pide que se declare a la localidad turística como ‘prioridad nacional’.
Ciudad de México.- Una caravana de familias y comerciantes afectados por el paso del huracán Otis, que devastó la ciudad turística de Acapulco, arribó el lunes a la capital del país para reclamar al gobierno la entrega de más recursos para los miles de damnificados y los cientos de hoteles y comercios que quedaron destruidos a consecuencia del poderoso ciclón de categoría 5 que dejó 47 muertos y varias decenas de desaparecidos.
La movilización, promovida por opositores al gobierno federal y estatal –ambas administraciones de Morena–, partió el domingo de Acapulco y pretendía llegar hasta la sede presidencial, en la plaza del Zócalo capitalino, para exigir al presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, mayor atención ante los problemas que enfrenta la ciudad turística donde persisten las fallas en los servicios públicos a 12 días del paso del huracán.
Algunos integrantes denunciaron que las fuerzas de seguridad cortaron el paso durante horas al grueso del grupo que solo al caer la noche se acercaba a la gran plaza con la intención de dormir ahí, indicó Ramiro Solorio. ”Tenemos muchos problemas, nos están bloqueando el acceso”, afirmó.
El opositor Evodio Velázquez, exalcalde de Acapulco, otro integrante del grupo, pidió al gobierno que se declare a la localidad turística como “prioridad nacional”.
Durante su conferencia matutina, López Obrador le restó importancia a la marcha y la atribuyó al “oportunismo” y “politiquería” de algunos adversarios. Mencionó, entre ellos, a la senadora Xóchitl Gálvez, quien será la candidata de una coalición opositora para las elecciones presidenciales del próximo año.
López Obrador afirmó el lunes que su gobierno dispone de suficientes recursos para atender la devastación que dejó Otis y anunció que tras conversaciones con varios empresarios y dirigentes del sector turístico se acordó que entre marzo y abril del próximo año se reabrirán al menos 35 hoteles en Acapulco.