Ciudad Juárez, Fecha – En una escena que se ha vuelto cada vez más común en la región fronteriza, decenas de migrantes fueron avistados esta tarde viajando a bordo del tren de carga apodado “La Bestia” mientras se dirigían hacia Ciudad Juárez.
El avistamiento tuvo lugar en el kilómetro 218, ubicado entre la caseta de peaje carretero de Villa Ahumada y la cabecera de Ciudad Juárez. Los migrantes, en busca de un mejor futuro, se acomodaban en los vagones de carga del tren, y cada vagón albergaba entre 10 y 20 personas. Muchos de ellos llevaban carpas o lonas improvisadas para protegerse del implacable sol del desierto. Además, se podían observar a algunas familias viajando juntas, incluso con niños pequeños.
Este evento ocurre apenas días después de que varios cientos de migrantes, en su mayoría de origen venezolano, cruzaran el peligroso Río Bravo y se entregaran a las autoridades de la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos en busca de asilo. El flujo constante de migrantes en esta ruta ha planteado preocupaciones sobre la seguridad y la capacidad de respuesta de las autoridades locales y las organizaciones humanitarias ante esta creciente crisis migratoria.
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha sido objeto de críticas en los últimos días debido a su política de permitir la entrada de migrantes a México sin proporcionar una atención adecuada, lo que ha generado un problema humanitario en el estado de Chihuahua.
A medida que aumenta el flujo de migrantes provenientes principalmente de Centroamérica, la falta de recursos y planes de atención por parte del gobierno federal ha dejado a Chihuahua en una situación de crisis. Los albergues y organizaciones locales se han visto desbordados al tratar de brindar refugio y asistencia a miles de migrantes que llegan a la región en busca de un futuro mejor.
El gobierno de Chihuahua, ha expresado su preocupación y frustración por la falta de apoyo del gobierno central en esta crisis.
El gobierno de López Obrador ha defendido su política de puertas abiertas, argumentando que busca promover una política de inmigración más humanitaria. Sin embargo, la falta de coordinación y recursos para hacer frente a la afluencia de migrantes ha generado un conflicto en el que los más afectados son los propios migrantes y las comunidades locales en Chihuahua.
Mientras tanto, líderes de la sociedad civil y defensores de los derechos humanos han instado al gobierno central a tomar medidas urgentes para abordar esta crisis humanitaria, brindando apoyo a Chihuahua y estableciendo un plan integral que aborde las necesidades de los migrantes y garantice su dignidad y seguridad.
La situación en Chihuahua continúa siendo un tema de preocupación tanto a nivel nacional como internacional, y la presión sobre el gobierno de López Obrador para abordar de manera efectiva esta crisis humanitaria sigue en aumento.