Estados Unidos.- Mientras los abogados de Donald J. Trump utilizan argumentos legales para defenderlo en la corte en contra de una serie de cargos penales, el expresidente ha realizado su defensa política: “He sido acusado por defenderlos a ustedes”.
En discursos, comentarios en redes sociales y anuncios, en repetidas ocasiones Trump ha declarado que las acusaciones son una cacería de brujas política, y se ha mostrado como un mártir que está recibiendo los ataques de los demócratas y el gobierno por causa de sus seguidores.
“Ellos quieren quitarme mi libertad porque nunca dejaré que les quiten su libertad”, les dijo Trump a sus seguidores en un evento de su campaña este martes en New Hampshire.
“Ellos me quieren silenciar porque nunca dejaré que los silencien a ustedes”.
En las dos campañas anteriores, en el 2016 y 2019, Trump se presentó ante los votantes como un candidato de la insurgencia que entendía sus problemas y prometió luchar por ellos.
Ahora, Trump ha convertido su campaña del 2024 principalmente acerca de sus quejas personales — intentando convencer a sus simpatizantes que se vean reflejados en él.
Sigue argumentando, falsamente, que la elección del 2020 le fue robada y presentándola también como un robo a los votantes.
El peligro legal que ahora enfrenta debido a múltiples acusaciones, les ha dicho a sus seguidores que es la persecución que también ellos podrían sufrir.
Aunque hay evidencia de que ese mensaje está resonando en los electores.
Lorraine Rudd, quien asistió al mitin de Trump en New Hampshire, dijo que después de su tercera acusación la semana pasada, en donde se señaló punto por punto en una acusación de 45 páginas sobre los esfuerzos que hizo para anular la elección del 2020, ella siente que también podría ser acusada falsamente.
“Si ellos lo están haciendo con él para dañarlo, también pueden hacerlo conmigo”, dijo Rudd de 64 años y residente de Massachusetts.
Al mostrarse como una víctima de la justicia penal — y recordar cuando enfrentó una investigación sobre la influencia rusa en la campaña del 2016 y su primer juicio político — han servido para consolidar el apoyo republicano alrededor de Trump.
En un sondeo realizado por New York Times y Siena College que fue dado a conocer la semana pasada, antes de la más reciente acusación de Trump, el 71 por ciento de los votantes republicanos dijeron que no había cometido graves delitos federales y que los republicanos tenían que apoyarlo.
