Ciudad de México.- “Es una muñeca” se dice de una mujer especialmente guapa. En el sentido clásico, las muñecas siempre son bellas y perfectas. Pero también son objetos.
Llega la película de una muñeca híper icónica: Barbie.
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Barbie (Margot Robbie) vive en Barbie Land. Sus días son increíbles: tiene un enorme guardarropa, pelo divino y en las noches, las Barbies – juezas, doctoras y hasta la presidenta- bailan felices. Pero un día, tiene un pensamiento inusualmente oscuro que cambia su vida.
Esta cinta muy meta hace una adaptación impecable del mundo de Barbie: casas, coches, lanchas, playa y hasta las tazas (vacías) para beber. Es decir, el diseño de producción es una verdadera delicia multicolor, súper atento al detalle y vaya que abundan.
Otro gran acierto son los diálogos: divertidos e inquisitivos, derrochando ironía y sarcasmo. Aquí se nota la mano de Gerwig y Noah Baumbach, el coguionista.
Entre broma y broma, el quid aspiracional se asoma: Barbie representa riqueza (ropa, coches, casas), belleza perfecta y eterna, éxito profesional. Las imperfecciones -ansiedad, celulitis (ja)- no tienen cabida.
La historia juega en diferentes canchas: la de los estereotipos y la del mundo real. La de las aspiraciones y los miedos. La plástica y la neurálgica. Va y viene entre ambas, lanzando dardos color de rosa muchos de los cuales dan en el blanco.
Uno de estos atina en el reparto: no hay mejor Barbie que Robbie. Físicamente igualita, pero, sobre todo, una gran comediante con dosis perfectas de carisma y vulnerabilidad. Ryan Gosling es un Ken sensacional: se ríe de sí mismo sin miedo al ridículo.
Eso sí: se alarga mucho la premisa sobre la rivalidad masculina. Hay momentos hilarantes, pero el gag extendido llega a ser desgastante en una cinta sobre estimulante.
Sin embargo, intercalado en la sátira, hay momentos emocionales. Desde Pinocho a Toy Story, se ha demostrado el estrecho vínculo entre muñecos y dueños. Perfilan ilusiones y alientan sueños.
BARBIE
Tres estrellas
Dirige: Greta Gerwig
Actúan: Margot Robbie, Ryan Gosling, America Ferrera
Duración: 114 min.
