Los Angeles — En 1969, Charles Manson envió a un grupo de jóvenes seguidores resentidos a perpetrar dos noches de matanzas que aterrorizaron a Los Angeles.
Uno de sus seguidores, Leslie Van Houten, fue liberada el martes pasado por dos de esos asesinatos, después de pasar más de medio siglo en prisión por dos de esos asesinatos. Es la única de los seguidores de Manson que sale libre pese a haber participado en los homicidios, que siguen grabados en la conciencia estadounidense.
Los miembros de la “familia” Manson llegaron a la casa de Sharon Tate en Hollywood Hills el 8 de agosto de 1969, donde apuñalaron, golpearon y mataron a tiros a la joven actriz y tres de sus amigos: Jay Sebring, estilista de las celebridades; Abigail Folger, la famosa heredera de la empresa de café que lleva ese apellido; y Wojciech Frykowski, aspirante a guionista. Mientras se dirigían a la casa, se toparon con un adolescente, Steven Parent, quien había visitado a un conocido en la casa de huéspedes de la propiedad y lo mataron a tiros.
La noche siguiente, Manson llevó a un puñado de seguidores, entre ellos Van Houten, a la casa de Leno LaBianca y su esposa, Rosemary, propietarios adinerados de una cadena de tiendas de comestibles. Manson ató a la pareja y dejó que los demás los asesinaran.
Manson y sus seguidores también asesinaron a otras dos personas en ataques separados y no relacionados: el músico Gary Hinman y el doble de Hollywood Donald “Shorty” Shea.
En las décadas posteriores, algunos de los seguidores de Manson han muerto mientras que otros permanecen tras las rejas.
LOS ASESINOS
*Charles Manson era un delincuente de poca monta que había entrado y salido de instituciones penales desde la adolescencia, antes de reinventarse a fines de la década de 1960 como una especie de gurú-filósofo. Su objetivo eran adolescentes fugitivos y otras almas perdidas, particularmente mujeres jóvenes atractivas que usó e intercambió con otros por sexo.
Los envió a masacrar a los ricos y famosos de Los Angeles en lo que los fiscales dijeron que era un intento por desencadenar una guerra racial: una idea que dicen que se le ocurrió de una lectura retorcida de la canción “Helter Skelter” de los Beatles.
Décadas después de su condena, Manson continuaría burlándose de los fiscales, agentes de libertad condicional y otros, a veces negando cualquier papel en los asesinatos y otras veces alardeando de ellos. Durante una audiencia de libertad condicional de 2012 afirmó: “He puesto a cinco personas en la tumba. Soy un hombre muy peligroso”.
Murió en 2017 a los 83 años, después de pasar casi 50 años en prisión.
*Susan Atkins, condenada por los asesinatos de Tate, LaBianca y Hinman, era una adolescente fugitiva que trabajaba como bailarina topless en un bar de San Francisco cuando conoció a Manson, en 1967.
Los asesinatos Tate-LaBianca quedaron sin resolver durante meses hasta que Atkins, quien estaba en la cárcel por cargos no relacionados, se jactó ante un compañero de celda por su participación en esos homicidios.
Durante el juicio, testificó que estaba “drogada con ácido” y que no sabía cuántas veces apuñaló a Tate mientras la actriz suplicaba por su vida. Atkins, quien se convirtió en una cristiana nacida de nuevo en prisión y denunció a Manson, relató entre lágrimas esa confrontación durante una audiencia de libertad condicional años después.
Murió de cáncer en prisión en 2009, a los 61 años.
*Leslie Van Houten, ex animadora deportiva de secundaria y reina de belleza escolar, vio cómo su vida se salía de control a los 14 años tras el divorcio de sus padres.
Recurrió a las drogas y quedó embarazada, pero dijo que su madre la obligó a abortar y enterrar el feto en el patio trasero de la casa familiar.
Van Houten conoció a Manson en un antiguo rancho para la filmación de películas en las afueras de Los Ángeles, donde había establecido a su llamada “familia” de seguidores.
No participó en los asesinatos de la casa de Tate, pero acompañó a Manson y a otros a la casa de LaBianca la noche siguiente. Ha descrito que sujetó a Rosemary LaBianca con una funda de almohada sobre la cabeza mientras otros apuñalaban a LaBianca decenas de veces. Luego, cuando Charles “Tex” Watson, seguidor de Manson, le ordenó “hacer algo”, dijo que tomó un cuchillo y apuñaló a la mujer más de una decena de veces.
Van Houten, de 71 años, obtuvo una licenciatura y una maestría en asesoría mientras estuvo en prisión y dirigió varios programas penitenciarios para ayudar a rehabilitar a otros reclusos. Repetidamente, se recomendó su libertad condicional, pero dos gobernadores estatales bloquearon su liberación.
Sin embargo, finalmente fue liberada.
*Patricia Krenwinkel era una secretaria de 19 años cuando conoció a Manson en una fiesta. Dejó todo atrás tres días después para seguirlo, creyendo que comenzaban una relación romántica.
Después de que él se volvió abusivo y la intercambió por sexo, dijo que intentó dejarlo dos veces, pero sus seguidores la trajeron de vuelta, la vigilaron de cerca y la mantuvieron drogada.
Durante una audiencia de libertad condicional de 2016, testificó que apuñaló repetidamente a Folger, luego apuñaló a Leno LaBianca en el abdomen la noche siguiente y escribió con su sangre “Helter Skelter” (confusión, a la deriva), “Rise” (levántense) y “Death to Pigs” (muerte a los cerdos) en las paredes.
Krenwinkel, de 75 años, permanece en prisión y sostiene que es una persona diferente, pero se le negó la libertad condicional más de una decena de veces.
*Charles “Tex” Watson había abandonado la universidad en Texas cuando llegó a California en 1967 en busca de “satisfacción mediante las drogas, el sexo y el rock and roll”, como explica en su sitio web.
Recordó haber conocido a Manson en la casa de Dennis Wilson, baterista de los Beach Boys, después de ver a Wilson viajando de dedo y llevarlo a casa.
Watson, de 77 años, condujo a los asesinos a la propiedad de Tate, mató a tiros a Parent cuando intentaba irse y participó en los asesinatos esa noche y la siguiente, en casa de los LaBianca.
Se convirtió en un cristiano nacido de nuevo en prisión y formó un ministerio de prisiones en 1980 que todavía dirige. Se le ha negado repetidamente la libertad condicional.
LAS VÍCTIMAS
*Sharon Tate, de 26 años, era modelo y estrella de cine en ascenso después de su papel estelar en la película de 1966 “Valley of the Dolls”. Tenía ocho meses y medio de embarazo cuando fue atacada y suplicó a sus asesinos que no dañaran a su hijo no nacido.
El esposo de Tate, el director Roman Polanski, estaba fuera del país la noche de los asesinatos y ha dicho que le tomó años recuperarse del dolor de perder a su esposa y a su bebé.
*Jay Sebring, estilista de las estrellas de Hollywood, era el exnovio de Tate y también rogó a los asesinos que no lastimaran al hijo nonato de ella. Lo balearon, le patearon la cara y lo apuñalaron varias veces.
*Wojciech Frykowski y Abigail Folger habían cenado con Tate y Sebring esa misma noche. Frykowski, de 32 años, era un amigo de Polanski de Polonia y aspirante a guionista. Una autopsia encontró que fue apuñalado más de 50 veces y que le dispararon dos veces. Su novia de 25 años era la heredera de la fortuna del café Folger. Logró escapar de la casa, pero fue alcanzada en el jardín delantero y apuñalada 28 veces.
*Steven Parent, un recién graduado de escuela secundaria que planeaba asistir a la universidad en otoño, había ido a la casa de huéspedes de la propiedad para visitar al cuidador de 19 años del lugar, un conocido casual llamado William Garretson.
*Leno y Rosemary LaBianca, propietarios de una cadena de supermercados en Los Ángeles, no tenían conexión con Sharon Tate ni con sus amigos glamorosos.
Su hogar fue elegido al azar por Manson, quien los ató y luego, antes de irse, ordenó a sus seguidores que los asesinaran. Entre las armas utilizadas se encontraba una bayoneta cromada.