El mandatario norcoreano Kim Jong Un ha pedido a sus científicos nucleares que incrementen la producción de material de grado armamentístico para fabricar bombas para su creciente arsenal.
El reporte del martes en la prensa estatal se produce luego de una serie de pruebas de misiles — siete lanzamientos tan sólo en lo que va del mes — y de las crecientes amenazas de usar las armas en contra de sus enemigos. Las pruebas armamentísticas norcoreanas y las maniobras militares conjuntas de Estados Unidos y Corea del Sur se han intensificado en un ciclo de provocaciones y respuestas, lo que deja de manifiesto las tensiones en la región.
Funcionarios señalan que Corea del Norte podría intensificar sus acciones en las próximas semanas o meses con despliegues más provocadores de su programa nuclear militar, incluida la posibilidad de su primera detonación de prueba de un dispositivo nuclear desde septiembre de 2017.
Durante una reunión realizada el lunes con funcionarios y científicos en un instituto estatal de armas nucleares, Kim resaltó la necesidad de incrementar la producción de combustible para bombas a fin de alcanzar sus objetivos de expandir “en progresión geométrica” su arsenal nuclear, y encargó la “importante misión” a su industria nuclear.
Kim también examinó los planes que ha establecido el país para contraataques nucleares mientras los científicos lo informaban sobre los más recientes sistemas armamentísticos de capacidad nuclear de Pyongyang y sobre el progreso en las tecnologías para la instalación de ojivas nucleares en misiles, señaló la agencia.
Las fotografías de la agencia mostraban a Kim hablando con funcionarios dentro de una sala en la que se exhibían lo que parecían ser varios tipos de ojiva, incluidas unas 10 cápsulas color caqui con puntas rojas y otras que parecían un cono blanco y negro con aletas o un enorme torpedo.
Un póster colgado cerca de uno de los dispositivos de color verde describía una ojiva de nombre “Hwasan-31”, que está basada en la palabra “volcán” en coreano, y daba a entender que podía instalarse en algunos sistemas de misiles balísticos de corto alcance o misiles de crucero norcoreanos. La prensa estatal no identificó ninguno de los dispositivos que aparecían en las fotografías.
Luego de realizar seis ensayos nucleares desde 2006, es posible que Corea del Norte posea decenas de ojivas que puedan instalarse en sus sistemas más antiguos, como los misiles Scud o Rodong. Pero existen diferentes valoraciones sobre qué tanto ha avanzado el país en cuando a la reducción de tamaño y la ingeniería de dichas ojivas para que puedan ser usadas en la amplia gama de armas nuevas que ha desarrollado de forma acelerada en los últimos años, las cuales posiblemente podrían requerir de mayores actualizaciones tecnológicas o pruebas nucleares.
Según un documento de defensa surcoreano publicado en febrero, se calcula que Corea del Norte posee 70 kilogramos (154 libras) de plutonio apto para armamento, lo que, según algunos observadores, bastaría para fabricar entre 9 y 18 bombas. El documento estima que Corea del Norte dispone también de “una cantidad considerable” de uranio altamente enriquecido.
El principal complejo nuclear de Corea del Norte en Yongbyon cuenta con instalaciones para producir tanto plutonio como uranio altamente enriquecido, los dos principales combustibles utilizados para construir armas nucleares. Se cree que Corea del Norte tiene en funcionamiento al menos otra planta para enriquecimiento de uranio además del complejo de Yongbyon.