Sin duda que toda separación por muy armónica que se quiera llevar siempre tendrá su grado de complejidad y dolor, bien sea porque uno de los dos todavía sentía amor por el otro o por simple costumbre.
Hay quienes buscan las mil y un formas de drenar para pasar ese llamado “guayabo”, algunos optan por tratar de desaparecer los recuerdos más mínimos otros toman venganza sin importar a quienes afecten con su comportamiento.
Desde que en junio de 2022 se anunciara la separación entre Shakira y Gerard Piqué las informaciones que se han desprendido al respecto no paran, cada día pareciera ser el capítulo de una telenovela cuyo final está muy lejos, menos cuando hay hijos de por medio como es el caso de estos famosos.
En la historia entre la barranquillera y Gerard Piqué, no se sabe quién está más afectado, si ella que a través de la música encontró el mejor refugio y después de dos canciones, ha sido en la tercera, ‘Music Session #53′, cuando se vació por dentro, con sus letras atacó a su ex duramente, o él (Piqué) que sorpresivamente anunció su retiro del fútbol profesional en medio de la tormenta mediática.
De lo que sí no se puede dudar es que los pequeños; Milan y Sasha, están llevándose la peor parte de esta disputa, a los pequeños no sólo les toca aceptar y afrontar que sus padres ya no estarán juntos porque han dejado de quererse, en el caso de ellos también está el cambio que se les avecina al tener que mudarse de país y alejarse de su padre según el acuerdo al que llegaron el año pasado.