Piqué se lleva tremendo chasco al llegar al que fuera su hogar junto a Shakira, pues en medio del alboroto con patrullas y un zafarrancho, ¿le mandaron sus trapitos que faltaban?
Tal parece que decirle sus verdades a Piqué le ha funcionado muy bien a Shakira, pues su más reciente canción Session 53 junto a Bizarrap se ha posicionado en la cima del mundo en cuanto a reproducciones digitales, por lo que decenas de personas acuden diariamente a su casa para felicitarla y compartir con ella este éxito, además de festejar los 10 años de Milan.
Pero en medio del zafarrancho que armó la fanaticada a las afueras del hogar de la colombiana, el ex futbolista acudió al que era su domicilio familiar para recoger a sus hijos, Milán y Sasha, cumpliendo así el régimen de custodia que acordaron en una reunión hace unos meses.
Todo indica que Shakira no ha querido verle la cara a su ex pareja, por lo que ha sido el personal de la casa fue el encargado de subirle las maletas al español, quien ni siquiera se bajó de su camioneta y recibió lo que muchos pensaban podrían ser los trapitos que le faltaban, todo esto mientras la policía estaba presente e intentaba ahuyentar a las personas que armaron tremendo alboroto.
Y es que mientras decenas de fans de Shakira celebraran su éxito y el cumpleaños de uno de sus pequeños y la colombiana salió a agradecerles, Piqué se hizo presente al poco tiempo y las patrullas estaban a su lado, pero el que fuera futbolista del FC Barcelona tuvo que esperar un largo rato a las puertas del domicilio, mientras la prensa grababa cada uno de sus pasos.
Esta, dicen, era una de las quejas del catalán, ya que tenía que quedarse en la calle a la espera de que la artista colombiana se decidiera a hacerle la entrega de sus hijos, pero en diferentes medios de Barcelona se reveló que esas maletas que le subieron a la cajuela, aseguran, son donde sus pequeños guardan su ropa y otras cosas para poder irse a convivir con su padre, quien por cierto traía cara de pocos amigos.