La elección se decidió hasta el ultimo voto.
Ciudad de México- La Ministra Norma Piña Hernández se convirtió hoy en la primera mujer en presidir la Suprema Corte de Justicia de la Nación y el Consejo de la Judicatura Federal, hasta el cierre de 2026.
Luego de tres rondas de votación, la jueza y magistrada de carrera, con 34 años de trabajo en el Poder Judicial Federal, se impuso a otros cuatro candidatos, y en la ronda final, logró seis votos, contra cinco del Ministro Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
Se trata de una elección histórica, no solo por el tema de género, sino porque devuelve la presidencia de la Corte a una jueza de carrera, luego del periodo de cuatro años durante el cual Arturo Zaldívar fue el primer miembro “externo” que encabezó la Corte.
“La incertidumbre es un presupuesto de la libertad”, afirmó Piña en su mensaje inicial, en alusión a la poca claridad sobre el posible ganador, incluso en los minutos previos a la sesión.
Reconozco la importantísima determinación de este Pleno de romper lo que parecía un inaccesible techo de cristal. Me siento muy fuerte, porque siento que estamos todas aquí, nos colocamos por primera vez al centro de la herradura de este Pleno, demostrando y demostrándonos que sí podemos”, afirmó.
Piña ha sido una de las Ministras mas críticas de las políticas y reformas del actual Gobierno.
Un análisis de Reforma sobre 18 votaciones del Pleno de la Corte entre 2019 y 2022, en asuntos relevantes para la 4T, indicó que la Ministra votó contra sus intereses en 83 por ciento de esos asuntos, superada solo por Luis María Aguilar, el ex presidente y decano que hoy tomó la protesta a su colega.
La votación de los ministros fue cardiaca. En la primera ronda, Piña tuvo tres votos, por dos para cada uno de los otros cuatro candidatos, que pueden votar por ellos mismos, lo que obligó a que todos participaran en la segunda ronda.
Javier Laynez, con dos votos, así como Alberto Pérez Dayán y Yasmín Esquivel, con solo uno, quedaron eliminados en la segunda ronda, abriendo paso a la final entre Piña y Gutiérrez.