La señora Alicia Flores López, hoy cumplió más de 72 horas sin alimento y sin agua, sigue instalada afuera de la escuela primaria Nicolás Bravo, no se moverá hasta que le den solución a la denuncia que puso en contra de Gerardo García, director del turno vespertino por intento de robo y hacia la maestra Rebeca Guzmán, por maltrato y discriminación hacia su hijo Maximus.
Después de tres días de ayuno de comida y agua, la madre de familia dijo desesperada, que los mareo no paran, que tiene mucho dolor de cabeza y ninguna autoridad de educación se ha acercado.
“Yo creo que tendré que tomar medidas más drásticas, porque mi salud no les importa, ni que mi hijo esté sin acudir a la escuela, me sorprende la falta de respuesta de educación”, expresó Alicia Flores.
Adelantó que esperará la hora de entrada del turno vespertino y si no hay respuesta, pensará en tomar medidas más drásticas como cerrar en cruce de las calles Pedro Rosales de León y Valentín Fuentes.