Ciudad Juárez.— Las revisiones que mantuvo el Gobierno de Texas, del 8 al 14 de abril, a los camiones de carga que ingresan desde México fueron “chicanadas” del gobernador Greg Abbott, quien busca ser el candidato republicano de Estados Unidos, dijo ayer el presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Los migrantes, ésa es la causa, entonces para eso (las) medidas de revisar los frenos (…) Son totalmente contrarias al libre comercio, les diría que son como ‘chicanadas’ de parte del Gobierno de Texas. Legalmente lo pueden hacer, pero es muy vil ese proceder. Lo pueden hacer legalmente, porque pueden decidir que va a haber revisión de frenos de los tráileres, y revisan todos los frenos y se tardan una, dos horas, tres horas y bloquean el paso”, señaló.
Dijo que Abbott busca ganarse la simpatía de la gente, aunque en realidad la perjudica, por lo que consideró que fue una medida irracional, ya que la gente se da cuenta del fondo.
“Y va a seguir pasando porque vienen elecciones. En vez de estar pensando, lo digo respetuosamente, en cómo resolver el problema de la inflación, ya están metidos en la politiquería, incluso violando el derecho internacional porque, con todo respeto, los estados no tienen facultad para hacer acuerdos con un país extranjero, nada más que no hay que ser tan estrictos, hay que ser tolerantes, la democracia tiene que ver con la libertad”, dijo López Obrador tras el acuerdo de Abbott con los gobernadores de los estados fronterizos con Texas, entre ellos Chihuahua.
Dijo que el propósito del republicano es también crear conflictos, “que se le haga el ‘caldo gordo’”, “que no se vayan a enojar nada más, que no pierdan el sentido del humor”, apuntó el presidente de México.
Las exhaustivas revisiones del Departamento de Seguridad Pública (DPS) a los camiones de carga, una vez que eran liberados por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés), provocaron que el tiempo de cruce aumentara de una hora y media en promedio hasta 12 horas, según los propios operadores.
La gobernadora de Chihuahua, María Eugenia Campos Galván, firmó con Abbott el jueves 14 de abril “un Memorando de Entendimiento para facilitar el cruce de vehículos de carga por la frontera de Chihuahua con Estados Unidos”, en el que el texano condicionó a la chihuahuense a disminuir la migración hacia Texas a cambio de eliminar las minuciosas revisiones que ordenó el pasado 6 de abril al DPS.
Los compromisos de Chihuahua fueron trabajar para asegurar que los vehículos que crucen un puerto de entrada a Estados Unidis cumplan las normas de seguridad aplicables a cada estado, reducir el tráfico de personas y contrabando del mortal fentanilo y otros narcóticos a lo largo y entre los puertos de entrada, y detener el flujo de migrantes que ingresan a Texas a través de Chihuahua.
Debido a que la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSPE) no tiene facultades para detener a los migrantes, su titular, Gilberto Loya, explicó a El Diario que el trabajo se enfocará en la detención de los traficantes de personas.
