Washington— Los arrestos por inmigración en el interior de los Estados Unidos cayeron en el año fiscal 2021 al nivel más bajo en más de una década, aproximadamente la mitad de los totales anuales registrados durante la administración Trump, según los datos del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) obtenidos por The Washington Post.
Los arrestos de ICE en el interior se desplomaron después de que el presidente Joe Biden asumió el cargo y estableció nuevos límites a la aplicación de la ley de inmigración, incluida una “pausa” de 100 días en la mayoría de las deportaciones. Un juez federal bloqueó rápidamente esa orden y los arrestos de ICE aumentaron un poco en los últimos meses, publicó The Washington Post.
Pero los niveles de cumplimiento bajo el nuevo sistema de prioridades de Biden siguen siendo relativamente bajos. Los oficiales que trabajan para las Operaciones de Ejecución y Remoción (ERO) de ICE realizaron alrededor de 72 mil arrestos administrativos durante el año fiscal que terminó en septiembre, según datos de la agencia, por debajo de 104 mil durante el año fiscal 2020 y un promedio de 148 mil anualmente desde 2017 hasta 2019.
Los datos de arrestos administrativos de ERO se consideran uno de los mejores indicadores de la actividad de ICE porque la aplicación interior está completamente bajo el control de la agencia, a diferencia de las deportaciones y otras métricas que aumentan y disminuyen con las tendencias migratorias en la frontera con México.