El delegado del gobierno federal en el estado de Chihuahua, Juan Carlos Loera de la Rosa, se dejó llevar y demostró una vez más su baja capacidad de político y revanchismo que tiene contra el Senador por Chihuahua, Cruz Pérez Cuéllar, quien es uno de los favoritos por encima de Loera de la Rosa para buscar la gubernatura en las próximas elecciones.
No es la primera vez que sin argumentos y sin decir nombres el delegado aprovecha cualquier momento para atacar al Senador a quién ve como su adversario político pues también busca la candidatura a la gubernatura por morena, aunque la popularidad de Loera de la Rosa está muy por debajo de Pérez Cuéllar.
Al estilo del gobernador Javier Corral, sin decir nombres mediante su cuenta de Facebook acusó al senador de tratar de obstruir su trabajo como delegado, para los conocedores de la política todos sabemos que se refiere al senador de Morena y de su mismo partido Cruz Pérez Cuéllar con quién tiene constantes desacuerdos que van en aumento.
Esto fue lo que público.
No es necesario un peritaje caligráfico para el ahora senador, el de “izquierda repentina”, su calidad de duartista la ha firmado con sus actos, su camaleonismo, su oportunismo político, su ambición es tal, que ha tratado de muchas formas a través de testaferros de manchar el trabajo de la representación del Gobierno Federal en Chihuahua, no lo logrará.
En el camino se acomodan las calabazas, ya les está llegando su tiempo a los corruptos vividores de la política.
Estas fuertes declaraciones han generado un revuelo en las redes sociales quienes han acusado al delegado Juan Carlos de la Rosa de no trabajar y únicamente anda encampañado.
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